Cogito Ergo Sum: Caos


En caos mis pensamientos, dejando de existir ante la sociedad.  

Un caos tras otro.

Empiezo recordando que el ser humano para la ingeniería social es, el eslabón más débil de esta cadena de evolución constante, somos parte de la misma expansión del universo. Por lo menos así tratan de explicarnos.

Hasta la fecha, casi todo se ha dicho. No obstante,  el modo como se intenta dar a entender, es lo que varía entre las personas que viven inmersas en mundos al revés. Creyendo los que “un tal sistema” les intenta adoctrinar. Los estereotipos están a la orden y dispuestos a darte una imagen de lo que te rodea, tan absurda perspectiva.

Cómo programados para estar tocando de puerta en puerta, alguna neurona fallará y esa puerta será difícil de abrir, tan simple saltar a la siguiente, pero somos insensatos en algunos casos, dejándonos llevar por una misma orden sin permitir cambiar el siguiente desastre.

Caos en mis pensamientos, puertas hacia tormentos. Sin calcular la desgracia, sin variar mi democracia. Atendiendo mis neuronas como broma, comprendiendo a largo mi caos con carisma. Divulgando sin fin el camino, cada uno sobre debil lino.  Al final esa mirada de cautivación, bella mujer ese caos esa motivación.

Vuelvo al caos. Cogito ergo sum.

Vuelvo al caos, las miradas cruzándose por un segundo. Las distracciones son medios que nos dejan sin motivo alguno. El enojo, esa parte de ti. Culpable sin razón, lo decidí así.

Te pienso, almohada ocupando tu lugar.  Tú,  siendo cortante conmigo sin alegar. Vacio me siento, agonía en desilusión o apego.  Este caos de pensamientos variables,  en silencio desde la distancia yo no te niego.

Eres mi caos mi tormento te lo digo, esos pensamientos que dormir no consigo